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Una mujer y su nieto en Tremseh, donde decenas
de personas murieron el jueves.
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BEIRUT, Líbano - El gobierno sirio
negó el domingo que había utilizado armas pesadas para atacar una
pequeña comunidad agrícola , a pesar de que las Naciones Unidas
supervisa la destrucción documentada sustancial en el pueblo, de
Tremseh, en un ataque donde la sobredimensionada cantidad de muertos
provocó una fuerte condena internacional.
En la capital siria, Damasco, el
domingo, se experimentaron algunos de los combates más intensos .
La lucha continua a través de todo
Siria , pero fuentes oficiales hablan de escaramuzas aisladas sin
embargo, el Comité Internacional de la Cruz Roja en Ginebra, anunció
el domingo que el conflicto podía ser clasificado como una guerra
civil. Nota con vídeo...
En Damasco, en una conferencia de
prensa transmitida por la televisión estatal siria, Jihad Makdissi,
un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Siria, dijo
que la violencia en Tremseh el jueves fue una operación militar
contra oponentes armados del gobierno.
"Lo que ocurrió no fue un ataque
a la población civil", dijo el Sr. Makdissi para la prensa en
Damasco, que el uso de armas pesadas contra un área tan pequeña
hubiera sido imposible. "Lo que se ha dicho sobre el uso de
armas pesadas carece de fundamento".
Dijeron inicialmente que la cifra de
muertos era superior a 200, pero el lo revisó y era según el, una
lista de 103 víctimas, mayoritariamente varones adultos jóvenes.
Makdissi dijo que la condena
internacional sobre el ataque era algo prematuro. Los primeros
informes que describieron como una masacre de civiles, es causado por
el retrato incompleto que ha surgido desde entonces, ha indicado que
se trataba de un enfrentamiento militar desigual en la que decenas de
combatientes rebeldes fueron masacrados.
El general Robert Mood, el líder de la
misión de observadores de las Naciones Unidas en Siria, dijo el
viernes que monitorea estacionado cerca Tremseh vieron al ejército
con armamento pesado y helicópteros de ataque.
La verificación independiente de los
acontecimientos en Siria es a menudo imposible, debido a que el
gobierno prohíbe a los medios de comunicación más extranjeros y
organizaciones internacionales no gubernamentales que operen en el
país.
Los informes de los equipos de
vigilancia de las Naciones Unidas que visitó el sábado y el
domingo, incluyendo su material de archivo de vídeo, sugirió que
Tremseh, cerca de 22 millas al noroeste de la ciudad central de Hama,
habían sido maltratadas en gran medida por las fuerzas
gubernamentales.
Los observadores que visitaron el
domingo contó con más de 50 casas que habían sido quemados o
destruidos de otra manera, con charcos de sangre y restos humanos que
se observan en varios de ellos, ese es el más reciente comunicado.
Se dijo que el equipo entrevistó a 27
residentes de la aldea, quien confirmó que el ataque comenzó a las
5 de la mañana del jueves en los bordes del pueblo, seguido luego
por rudo asalto terrestre.
El ejército llevó a cabo un rapido
acceso militar casa por casa, exigiendo que los hombresentregen sus
documentos de identificación. Algunos murieron en el acto, mientras
que a otros se los llevaron, los residentes dijeron esta declaración
a las Naciones Unidas.
"El ataque parece dirigido a los
desertores del ejército y activistas", dijo el comunicado. Las
Naciones Unidas también dijo que el armamento utilizado contra el
pueblo incluido artillería, fueron simplemente morteros y armas
pequeñas, mientras que un médico y sus hijos estaban entre los
muertos cuando un proyectil de mortero impactó contra su casa.
Los monitores dijeron que todavía no
podían confirmar el número de víctimas, pero reiteraron su demanda
de que el gobierno sirio deje de usar armas pesadas en los centros de
población.
Hubo fuego de mortero y disparos con
armas pesadas dirigidos contra el barrio de Tadamon en Damasco alli
hubo uno de los combates más duros. Columnas de humo negro que se
podía ver desde lejos y se elevaban por encima de toda la zona.
Otro activista, Samir, llega a través
de Skype, y dijo: "Fue una verdadera batalla".
La declaración de la Cruz Roja que el
conflicto sirio constituye una guerra civil confirmó lo que muchos
observadores ya han dicho.
Llamar al conflicto una guerra civil
significa que el derecho internacional humanitario se aplica, y se
otorga a todas las partes en un conflicto el derecho a usar la fuerza
adecuada para alcanzar sus objetivos.
La evaluación de la Cruz Roja también
podría servir de base para futuros crímenes de guerra y aumentar
las consecuencias jurídicas de cualquier tipo de abuso. Pero no
estaba claro que tendría un efecto concreto en la lucha.
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